Los drones o vehículos aéreos no tripulados es una de las industrias más prometedoras del futuro por todos los servicios que ofrece, además de los problemas que solucionarán. Asimismo, el mercado potencial es muy importante para la economía mundial mientras su incidencia esperada abarcará muchos otros sectores para mejorar su productividad económica.
Las regulaciones sobre el vuelo de drones y su uso no han tardado en llegar por parte de los estados. Asimismo, hay numerosas limitaciones para poder usar el vehículo aéreo no tripulado como diversión o trabajo.
Las regulaciones y el crecimiento van de la mano
Las regulaciones tienden a ir de la mano con la liberación del sector y su crecimiento futuro. Asimismo, un ejemplo claro es el de la marihuana y su futura legalización. Sin embargo, el caso de los drones es algo distinto, ya que su uso principal hace varios años era para mejorar las acciones del ejército. Actualmente, han irrumpido numerosas compañías comerciales para poder ofertar sus naves no tripuladas al público general y para brindar sus servicios a otras compañías de sectores como la agricultura, el transporte o las infraestructuras.
Las leyes son muy estrictas en países como Estados Unidos y Europa, con limitaciones en los horarios de vuelo, edad para poder pilotar la nave, altura permitida o estar bajo efectos de sustancias como el alcohol o las drogas. Además, el piloto deberá tener una formación adecuada para poder realizar operaciones de vuelo, aunque esto depende del tipo de dron utilizado.
Un mercado futuro con grandes expectativas
El mercado potencial para la industria de los drones es de 127,3 mil millones de dólares, según apunta un informe de “Clarity From Above” elaborado por PwC. Estos son la suma de los futuros ingresos por los servicios prestados a un número muy alto de industrias que podrán ver como su negocio se beneficia de los servicios ofrecidos por los drones.
La industria de las infraestructuras podría sumar 45,2 mil millones de dólares al sector de los vehículos aéreos no tripulados gracias a que facilitarían los trabajos más peligrosos además de ayudar a recopilar datos y facilitar las tareas en las construcciones. Por otra parte, la agricultura generaría 32,4 mil millones de dólares, ya que la utilidad de los drones en el sector del campo podría ser infinito al empezar por la plantación de semillas y concluir por la recolección. La tercera industria más beneficiada y que podría generar más dinero es la del transporte, teniendo unas estimaciones de 13 mil millones de dólares. Sin duda, los drones abaratarían los costes para enviar productos, además del tiempo de entrega. Asimismo, competirán de forma directa con las firmas del transporte por carretera.
Los montos económicos más bajos vienen de la seguridad y sus 10 mil millones de dólares, el entretenimiento y los medios con 8,8 mil millones de dólares. Por último, la estimaciones para los seguros son de 6,8 mil millones de dólares y de 6,3 mil millones de dólares para las telecomunicaciones, mientras que la minería podría facturar 4,4 mil millones de dólares.
¿Cuáles son los beneficios de las tres primeras industrias?
El sector que más aportará a la economía de los drones es de las infraestructuras con una estimación de 45,2 mil millones de dólares. La función principal de las naves no tripuladas será ayudar en los trabajos de más riesgo para liberar peligros a las personas responsables de estos cargos, además de recolectar información sobre la evolución de las construcciones. La actividad más importante en este sector es la inspección de complicadas zonas para el acceso humano. Asimismo, los drones están equipados con cámaras de alta definición, además de otras herramientas, para detectar cualquier problema en los lugares de visita. Por último, los vehículos aéreos no tripulados pueden chequear cualquier tipo de obras, desde puentes hasta pozos petrolíferos o ferrocarriles.
La agricultura es la segunda industria más importante para los drones al tener una estimación de ingresos por valor de 32,4 mil millones de dólares. Cabe destacar que los vehículos aéreos no tripulados son una enorme oportunidad para que los agricultores actuales aprovechen las nuevas tecnologías para contrarrestar los malos tiempos temporales que acarrean para el campo. La principal función para los cultivos son las cámaras infrarrojas de los drones, que aportan datos relevantes como es el estado de las plantas, como se encuentra la tierra o la fertilidad. Por otra parte, los drones pueden detectar en los inicios las plagas o las malas hierbas al poder recorrer todo el campo en un corto período de tiempo. Asimismo, podrán realizar el tratamiento atacando directamente al lugar perjudico, recortando de esta manera empleados y contaminación al no tener que rociar todas las plantas colindantes.
La logística o transporte es uno de los sectores más beneficiados por los drones, viéndose reflejado con una estimación en ingresos de 13 mil millones de dólares. La ventaja principal está dedicada a las operaciones de inventario, pudiendo realizar control de inventarios o poder localizar las referencias en las estanterías del almacén. Por otra parte, pueden vigilar las instalaciones donde se encuentran la mercancía, evitando así posibles personas interesadas en llevarse productos que no les pertenecen. Además, los drones también pueden preparar pedidos al llevar la mercancía hasta la zona de empaquetado para su posterior envío. Los beneficios también son numerosos, pero el principal es la reducción en el coste del transporte, ya que permiten realizar los envíos de forma más barata y mucho más eficaz. Asimismo, tienen la posibilidad de realizar las entregas en lugares más complicados y costosos para el transporte convencional, junto con la reducción de las emisiones de CO₂ en la atmósfera y la ayuda para combatir el cambio climático en el planeta.
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